viernes, 18 de mayo de 2018

Verstehen o paren el mundo que me quiero bajar...

Hoy me animo a escribir de nuevo, ya que múltiples vicisitudes me han llevado a un silencio, casi espasmódico, en mi amada Venezuela. La falta de recursos y un sin numero de situaciones que nos llevan a perder nuestro valioso tiempo en colas interminables para conseguir los insumos de primera necesidad, aunado a que pareciese que el odio, la envidia y la violencia se han apoderado de mi país, me han paralizado en el asombro. Casi no lo puedo creer, si no fuese porque mi familia no se quiere ir de aquí, en virtud de su arraigo a lo tradicional y a la tierra, ya yo me hubiese ido también como tantos otros, por el temor que genera vivir en Venezuela.

Lo único que puedo resaltar es que debido a que muchos padres, a veces por necesidad, dejaron la educación de sus hijos en manos no preparadas para tal fin, con dudosa formación en valores, nuestra vida social se cae a pedazos. A veces me pregunto: ¿Realmente vivimos en Venezuela? ¿Es este mi país? ¿Que pasó con los talentos que otrora fueron capaces de gerenciar a Venezuela, de forma tal que quienes producimos bienes y servicios, en virtud de nuestros conocimientos como es lo justo, tuviésemos mejor calidad de vida? ¿Dónde esta ese talento ahora? ¿Qué pasó con esta generación? ¿No aprendieron nada de la anterior o aprendieron sólo lo negativo de ella?

La imagen que viene a mi mente es estar nadando en un lago a punto de congelarse, el cual gracias a su temperatura ha congelado hasta mis pensamientos, no mis emociones, cosa seria en mi ya que el conocimiento ha sido la máxima de mi vida. Creo que verstehen (comprensión) ha sido una de mis grandes metas. Una experiencia sin comprensión de la misma no es aprendizaje. El aprendizaje es la vida y por ende sin aprendizaje la vida se vuelve un caos. Parece que algunos venezolanos no hemos aprendido nada como seres sociales. Para comprender lo social debemos imaginarnos dentro de nuestras creencias. Pero, ¿cuales son esas creencias hoy día?

Cuando hablo de nuestras creencias, la gente me habla del bello joropo (el cual, no es la única música venezolana), de la hallaca (que es una unión indígena y española), del hermoso ballenato (que es de Colombia y no venezolano) y pare usted de contar... Aquí parece que costumbre y creencia fuesen lo mismo. Sin embargo, la creencia es una manifestación mas profunda y tiene que ver mas con los valores relacionados a ella y su puesta en practica. A veces cuando hablo con un venezolano me da la impresión que el "no" y el "no se puede" están a flor de piel. Cuando solicito una explicación argumentada al respecto, casi siempre contestan "porque así lo pienso yo". Existe una necesidad demasiado marcada de ser reconocido y esto pasa por el tamiz de ser mejor que el otro, sea quien sea ese legitimo otro. Esto trae como consecuencia una incapacidad de observar-se para evolucionar, crecer y desarrollar-se

No hay camino, ni meta, realmente, ¿se hará camino al andar? El camino, por lo menos, debería poseer un norte, para saber a donde se quiere llegar y en el ínterin un legajo de síes y noes, producto de las decisiones, el que no sabe a dónde va... puede llegar al lugar que menos desea. Ya que, si existen solo noes, no se llega a ningún lado. ¿Por que? Porque toda la teoría sobre desarrollo social y organizacional así lo indica y, además, existen muchas empresas y comunidades exitosas que sirven de ejemplo.

"Si no entendemos a nuestros semejantes, nunca los amaremos y... ciertamente, si no los amamos... ellos nunca entenderán..." Charles Kingsley.

Esto, solamente en el caso que seamos sanos de mente y espíritu. Creo que verstehen (comprensión-entendimiento), como dice Kingsley, ha sido una de mis grandes metas en la vida. Una experiencia sin comprensión de la misma no es aprendizaje. El aprendizaje es la vida y por ende sin aprendizaje la vida se vuelve un caos. That's it!!!

¡Hasta pronto mis queridos lectores!!!


Peripecias de la Vida 1

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